07 abril, 2011
Torre de los diablos
El origen de las defensas de la costa lo hemos de encontrar en el rey nazarí de Granada Yusuf I que manda construirlas para defenderse de la piratería y posibles invasiones.
Exif: f11, ISO200, 1/500seg,
Nikon D700, 24mm.
En tiempo de los Reyes Católicos.
La actuación de las fuerzas acantonadas en las ciudades ribereñas del mar de Alboran sólo podía ser efectiva si eran alertadas con tiempo suficiente para intervenir; su eficacia dependía del funcionamiento de un sistema de vigilancia basado en una red de atalayas y torres a lo largo de la costa.
Exif: f11, ISO200, 1/500seg,
Nikon D700, 24mm.
Según el reglamento de Carlos III
La señal de rebato será encendiendo el hacho y arrojándolo continuamente de la torre al campo con proporción bastante para que pueda distinguirse por las torres colaterales. Estas se harán de día en las ocasiones en que descubran embarcaciones sospechosas que se acerquen a tierra o que persiguen algunas barcas de pescadores o de comercio; de noche, cuando se vea que se acerca alguna embarcación a tomar tierra. Si de día se descubren algunas embarcaciones de moros que siguen su rumbo, solo harán ahumadas como aviso a las embarcaciones de comercio para que se acojan al abrigo del cañón, y a las del corso para que sepan a qué paraje han de enderezar su rumbo.
Exif: f11, ISO200, 1/500seg,
Nikon D700, 24mm.
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